14) CICUTA
Nombre
Científico:
Conium maculatum L.
Nombres
Populares:
cicuta, cicuta mayor, ciguta, perejil lobuno, hemlock (Ingl), cegude
(Port), grande cigüe (Franc), cicuta maggiore (Ital).
Descripción
Botánica:
Se trata de una hierba bianual, perteneciente a la familia de las
Umbilíferas, caracterizada por presentar una altura cercana al metro y
medio; tallo erecto, hueco, muy ramificado, con manchas púrpuras hacia
la base; hojas bitetrapinnadas, color verde oscuro y finamente
recortadas; umbelas florales de color blanquecino, que hacen su
aparición desde mediados del verano hasta mediados del otoño.
La cicuta
es originaria de Europa pero presenta en la actualidad una
distribución cosmopolita, sobre todo en las zonas templadas. Crece
silvestre en lugares húmedos, cálidos, bordeando caminos o a la orilla
de ríos. La planta desprende un olor desagradable cuando se aplasta
(los botánicos afirman que “huele a rata”).
Parte
Utilizada:
Fruto.
Historia:
La cicuta fue muy utilizada en la antigua Grecia para la ejecución de
personas, entre los que se destacaron Socrates (399 a.C) Focion y
Termanes. El nombre de conium deriva del griego koneion y significa
desvanecimiento. Dioscórides fue el primero en reconocer sus virtudes
medicinales, recomendándola en primera instancia para uso externo, en
casos de herpes o erisipelas. Asimismo, Plinio y Avicena la
recomendaban para tratar tumores de piel. En la Edad Media se creía
que la cicuta junto a la mandrágora, beleño negro y belladona
conformaban un ungüento secreto que permitía a las brujas volar.
En 1831 se
aísla el primer alcaloide: la conima, la cual fue posteriormente
sintetizada hacia el año 1886 quedando en la historia como el primer
alcaloide que se pudo sintetizar en laboratorio. La toxicidad de la
cicuta delimitó notablemente su uso, aunque en 1850 Carpenter sostenía
que la especie que se cultivaba en Londres era completamente
inofensiva. De hecho, las cicutas que crecen en climas fríos presentan
menor cantidad de alcaloides.
Composición
Química
Alcaloides
derivados de la piperidina (2 %): Presentes mayormente en los frutos
en maduración y en menor proporción en las raíces y hojas: conuna
(cicutina), metilcicutina, conhidrina, pseudoconhidrina, paraconina. A
medida que la planta envejece el tenor en alcaloides disminuye.
Otros:
goma, pectina, resina, sales, carotenos, ácido cafeico, ácido acético,
ácido cónico, aceite de
conio, glucósidos flavónicos y cumarínicos, etc.
Acciones
Farmacológicas:
Debido a la gran fluctuación en el contenido de alcaloides entre
idénticos ejemplares, no se recomienda el uso interno de formulaciones
galénicas de cicuta. Los alcaloides presentan acción antiespasmódica
y analgésica, en especial sobre las terminales nerviosas sensitivas,
lo cual ha hecho que se emplearan en pequeñas dosis en casos de tos
espasmódica y cáncer gástrico (actuaría sobre el nervio neumogástrico)
(Arteche García A y col., 1994). La coniína (su principal alcaloide)
tiene una fácil penetración por piel lo cual hace que se emplee como
anestésico en casos de neuralgias intensas (Font Quer P., 1981).
Efectos
Adversos y/o Tóxicos:
La cicuta es una planta sumamente peligrosa por vía interna. Los
cuadros de intoxicación por lo general cursan con ardor en fauces,
nauseas, vómitos, vértigos, sed, diarrea, parestesias, midriasis,
disartria, parálisis muscular, convulsiones y fallecimiento por
parálisis respiratoria alrededor de las cuatro horas de haber
consumido la droga. Sólo bastan entre 6 y 10 g de hojas para provocar
la muerte de un adulto (Drummer O et al., 1995). La dosis mortal para
un caballo oscila entre 1,8 y 2,2 kg de planta fresca y para el ganado
vacuno entre 4 y 5 kg (Forsyth A ., 1968).
Atento la
semejanza entre los frutos de cicuta con los del anis, las hojas con
las de perejil y las
raíces con las de la pastinaca (Pastinaca sativa), se recomienda
precaución a la hora de la recolección de estas especies para uso
culinario.
Si bien la
cocción hace perder buena cantidad del tenor de alcaloides, se
recomienda no infundir o cocer esta especie para uso interno. Esta
planta ha de manipularse con cuidado pues puede ocasionar dermatitis
de contacto (Bown D.,1996).'
En África
se han dado algunos casos de personas que fallecieron por comer
codornices in-toxicadas
con cicuta. Las investigaciones han demostrado que el ave no es
sensible al veneno y que este tipo de intoxicación coincide únicamente
con la llegada del ano nuevo, cuando la codorniz emigra en el invierno
hacia África donde se alimenta de semillas de cicuta. Por lo general,
esta intoxicación en humanos no es mortal (salvo los casos descriptos)
y los pacientes logran recuperarse (Van Veen A., 1966). Ya en el Antiguo
Testamento, salmo 78, se hace referencia a este tipo de intoxicación
(De Waal M., 1997).
Usos
Etnomedicinales - Formas Galénicas:
Antiguamente se empleaba la cicuta para tratar epilepsias, mal de San
Vito, asma y estados maníacos. En la actualidad popularmente se
emplean cataplasmas con la planta fresca o el aceite de cicuta como
analgésico y antitumoral. Para ello mezclan 10 g de polvo de cicuta
con 250 g de zanahoria triturada y se aplica directamente sobre el
tumor (en especial en cáncer de mamas).
Para casos
muy puntuales se preparan comprimidos de 5 mg en base a bromhidrato de
coniína para ser administrados hasta tres veces al día. La dosis
máxima de los frutos de cicuta reducidos a polvo y administrados en
forma de papeles o píldoras, alcanza al gramo diario. Las
formulaciones homeopáticas de cicuta (conocidas como conium) carecen
de toxicidad y se emplean en casos de mareos, tensión premenstrual,
ansiedad y depresión.
FARMACOPEA
Cicuta oficinal
Fruto
Constituyente activo principal: conicina
Dosis máxima:
De una vez: 0,25 gramos
En 24 horas: 0,75 gramos
Extracto de cicuta
Extractum
conii
Frutos de
cicuta en polvo semifino (tamiz nº 26): 1000 gramos
Alcohol de
70º: 6000 gramos
Agua
destilada: c.s.
Procedimiento: digestión
Extracto
pardo oscuro
Dosis máxima:
De una vez: 0,05 gramo
En 24 horas: 0,20 gramos

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