32)IPECACUANA

  Nombre Científico: Cephaelis ipecacuanha (brotero) A . Richard.

 

Nombres Populares: ipecacuana, ipeca, poaya(port), ipecacuanha (Ingl).

 

Descripción botanica: Se trata de ulna pequeña planta arbustiva, perteneciente a la familia de las Rubiáceas, caracterizada por presentar ulna altura entre 30y 40 cm; raíces fibrosas anilladas y reptantes; tallo glabro, verde, angular, provisto de pocas hojas las cuales son enteras, ovaladas y opuestas; flores blanquecinas sitas sobre pedúnculos terminales solitarios, que hacen su aparición desde fines Del invierno y mediados de la primavera. El fruto es ulna drupa de color violáceo o púrpura oscuro.

La ipecacuana es originaria de los bosques húmedos y umbrosos Del sur Del Brasil, siendo posteriormente introducida en otras latitudes donde es cultivada: Malasia, Birmania e India (bengala). Existe ulna variedad que crece en las zonas boscosas humedas de Colombia, Venezuela y Costa Rica, conocida como Cephaelis acuminata Karsten, con la cual comparte muchas de las características botánicas y medicinales

 

Parte Utilizada: Corteza de la raíz.

 

 Historia: Fue una planea muy empleada por los nativos sudamericanos durante la preconquista, siendo introducida en Europa hacia el año 1658. Con el nombre de ipecacuana los indígenas del Brasil reconocían a todas aquellas raíces capaces de producir emesis.

En 1688 un medico francés llamado Helvetius logró importantes éxitos en el tratamiento de las disenterías, vendiendo su hallazgo a la corte del rey I.uis XIV. Debe recordarse que este mismo rey ya había pagado una fortuna por la quina. Según el famoso médico Charcot: "... La ipecacuana es para la disentería lo que la quina es para el paludismo ".

El reconocimiento botánico de la ipecacuana acaeció recién en el año 1803 por Brotero, a partir de muestras de raíces provistas por el naturalista Gómez. En 1817 Pélletier aisla la emetina. nombre que no solo alude a su cualidad terapéutica sino también por haberla extraído de la especie Psytrochia emética. En 1912 Vedder en Filipinas pudo demostrar que la emetina era capaz de destruir amebas in vitro. aún en diluciones de 1: 100.000.

Ese mismo año Roger logra introducir la emetina por vía hipodérmica a través del clorihidrato, siendo publicados sus trabajos en British Medical Journal y The Lancet.

Durante los conflictos bélicos Europa se vio privado de importar la droga de Brasil, debiendo recurrir para tratar las numerosas amebiasis, a otras drogas vegetales. Por ejemplo, Inglaterra recurrió a especies de la India y Egipto (Holarrhena antidisentérica, Simaruba amara, Quassia amara, ctc), mientras que el resto procuró alentar fórmulas sintéticas.

 

Composición Química:

 

Alcaloides isoquinoleínicos (2-3,5%): emetina (60-70%), cefelina (25%) y grupos minoritarios como la psicotrina, oxi-metilpsicotrina, ipecamina, hidroipecamina y emetamina.

Actualmente la emetina puede prepararse en forma semisintética mediante la metilación de la cefelina. La ipecacuana de Río de Janeiro contiene 3-4 veces más emetina que cefelina, en cambio la ipecacuana de Cartagena contiene cantidades prácticamente similares

Otros: ipecósido (glucósido iridoide), taninos catequicos, sales minerales (potasio, calcio, silicio), iridoides (swerósido, 7-dehidrologanina), ácido ipecacánico, almidón, etc.

 

Acciones Farmacológicas: Las mismas están en  función de sus principios alcaloideos mayoritarios: emetina y cefelina, generando diferentes respuestas según las dosis empleadas. Las bajas provocan un efecto expectorante, mientras que las altas son emetizantes. Las dosis usuales generan un efecto antidisentérico y antihelmíntico.

La emetina en dosis terapéuticas presenta un marcado efecto inhibitorio sobre la fase ameboide de la Entamoeba histolytica, aunque no resulta tan efectiva frente a las formas quísticas que por lo general habitan la luz intestinal. Esto conlleva a la eliminación parcial de trofozoitos, trasformándose los restantes en quistes visibles en las heces, lo que implica que el tratamiento ha sido incompleto y el paciente continua siendo portador (Harries)., 1982).

Para evitar esto se combina la emetina con otras drogas antiamebiasicas en el curso del tratamiento o se reemplaza por nitroimidazoles, de eficacia similar pero menos tóxicos (Goldman P., 1980). También se puede recurrir al análogo dihidroemetina que también ha resultado ser menos tóxico que la emetina, siendo su dosis en adultos equivalente a 1-1,5 mg/k diarios (máximo 90 mg diarios y cinco días de tratamiento). Sin embargo, la baja tolerancia gástrica hace que estos alcaloides sean administrados parenteralmente, lo cual no esta exento de reacciones adversas locales tales como dolor o absesos (Goodman y Gilman A., 1986).

En los casos de abseso amebiano hepático, la emetina actúa satisfactoriamente frente a los parásitos enquistados, pudiendo incluso prevenir la aparición de brotes recurrentes (Woolfe G.,1965). Frente a disenterías amebianas suele resultar efectivo el clorhidrato de emetina por vía parenteral (65 mg/ml), mientras que por vía oral se recomendó durante un tiempo el empleo de yodobsmutato de emetina, compuesto insoluble en estómago, pero con resultados poco satisfactorios. La emetina también resulta útil frente a la Fasciola hepática.

En cuanto a su efecto emético, el mismo pudo dilucidarse recién en la década del '50 al comprobarse que la emetina (y en mayor medida la cefelina) generan una excitación de la zona gatillo correspondiente a las terminales reflejas del nervio vago sumado a una acción directa sobre los quimiorreceptores del área posterior del bulbo (Borison H. y Wang S., 1953) y una acción irritativa sobre el tracto entérico (AllporrR.,1959).

Ante cuadros de intoxicación se recurre al simple jarabe (no el extracto líquido que es 10 veces más potente y puede resultar fatal) en monodosis orales para niños menores de una año 5-10 ml, y en niños mayores y adultos de 15 ml. Se puede repetir a los 20 o 30 minutos si aún  han aparecido los vómitos (Manno B. Y Manno J., 1977). Debe recordarse que por vía oral el tiempo necesario para producir emesis es de 15-30 minutos, lo cual no deja de lado realizar simultáneamente algún método de lavado gastrico  (Goodman y Gilman A., 1986).

En lo concerniente al área respiratoria, la misina estimulación refleja del nervio vago produce un aumento en las secreciones bronquiales, favoreciendo la fluidificación de las mismas. Es útil en casos de tos seca o improductiva, para lo cual se prescriben dosis de 0,05-0,1 g de droga (ó 0,5-2 mg de alcaloides totales) en forma de jarabe por vía oral (Canigueral Polcara S-,1993).

La ipecacuana se encuentra registrada por la Farmacopea Nacional Argentina en su 6a Edición (Amorín J., 1980) y por casi todas las farmacopeas del mundo. La droga entera ha de contener no menos del 2% de alcaloides totales. Las dosis máximas oficinales son de 1 g/dosis y no más de 2g/diarios. Sin embargo, en la terapéutica de la amebiasis se han empleado dosis mayores.

 

Farmacocinética: La emetina es eliminada lentamente entre los 20 y 40 minutos de haber sido inyectada por vía subcutánea.

Puede encontrarse aún vestigios a los dos meses de su administración, lo que indica un efecto acumulativo peligroso ante dosis reiteradas.

Los análisis de hígado de ratas, gatos y perros, revelan que la droga se acumula preferentemente en este órgano en el orden del 10-30% de los alcaloides administrados (Randomski J. et al.1951).

 

Efectos Adversos y/o Tóxicos: Los alcaloides deben administrarse por períodos prolongados ya que presentan efectos acumulativos al provocar sobrecarga funcional renal. Las altas dosis se manifiestan a través de náuseas, vómitos, hipotensión arterial, polimialgias, arritmias cardíacas, acúfenos, hipoestesia en miembros, polineuritis y, en casos extremos, colapso por paro cardiorrespiratorio (Oackey G., 1973; Yang W. y Dubick M., 1980). Los casos de neuritis y polineuritis (muy poco frecuentes) pueden aparecer aún con dosis bajas (0,20 a 0,40 g) siendo de larga evolución y tardando entre 2-3 semanas en desaparecer.

La inyección intrarraquídea de emetina en perros a la altura de la 5a-8a vértebra dorsal produce una inmediata parálisis flaccida. La inhalación del polvo es irritativa de las mucosas, provocando estornudos, tos e incluso eritemas pruriginosos y conjuntivitis. Las sustancias responsables serían glucoproteínas (Stuart M.,1981). La acción terapéutica de la ondina en las disenterías se traduce por el aumento en la consistencia de las heces, en cambio cuando resulta tóxica se manifiesta por la reaparición de diarrea.

 

Contraindicaciones: No debe suministrarse durante el embarazo, la lactancia, en el curso de enfermedades cardíacas, neuromusculares, insuficiencia renal y cuadros hipotensivos severos. En casos de amebiasis, está contraindicada la vía endovenosa por ser tóxica (sí subcutánea o intramuscular).

Interacciones Medicamentosas: La ipecacuana puede resultar inefectiva cuando se administran simultáneamente otras drogas antieméticas como la fenotiazina. También reduce su efecto emético la administración simultánea de carbón activado.

 

Usos Etnomedicinales  Formas Galénicas: Popularmente se emplea la decocción de la raíz en casos de parasitosis, tos, catarros, asma bronquial y cuadros disentéricos.

Su efecto emético es empleado ante cuadros de intoxicación digestiva. Antiguamente eran muy empleados los macerados, infusiones, decocciones y la infuso-maceración fraccionada, conocida como ipeca a la brasileña.

Por lo general, se recurre a las formas galénicas líquidas. Una de ellas es el extracto fluido (1 g = 45 gotas), con una concentración en alcaloides (emetina y cefelina) del 1,5%, administrándose 1-5 gotas diarias (como expectorante)

 

Productos comerciales:

  CATARROSINE: Lab. Fecofar: expectorante infantil. Contiene: E.F. de ipeca 0,05 ml de fórmula asociada con benzoato de sodio, E F de polígala, Tintura de grindelia, Tintura de Drosera, etc. Presentación: frasco por 120 ml.

 • COBENZIL COMPUESTO: Lab. Abbott. Antitusivo, expectorante. Contiene: E.F. de ipeca 0,1 ml en fórmula asociada con carbinoxamina, dextrometorfan y efedrina. Presentación: por 120 ml

 • DROSERA OLIGOPLEX: Lab. Dt . madaus y Co. Expectorante.contiene: tinturas de ipeca, acónito, chamomilla y  drosera. Presentación: frasco-gotero por 30ml

  EUPATHORIUM OLIGOPLEX:Lab. Dr .Madaus y Co. Contiene: tinturas de ipeca, eupatorio, drosera y bryonia. Presentación: frasco-gotero por 30ml.

  FENERGÁN EXPECTORANTE: Lab. Elvetiumrhodia. Expectorante. Contiene E.F. de ipeca 60mg en fórmula asociada con fosfato de codeína, clorh. De prometazina,Sulfoguayacolato de potasio. Presentación : envase por 120 ml.

  TUIL: Lab. Sterling. Laxante. Contiene extracto de ipeca en fórmula asociada. Presentación. Por 32 tabletas.

 

FARMACOPEA

 

Ipecacuanhae radix

Raíz desecada  con mínimo 0,20 % de alcaloides

 

Pulvis Ipecacuanhae

2% de alcaloides totales

 

Tinctura Ipecacuanhae

A 10 % en peso con alcohol de 70º

 

Siripus Ipecacuanhae

A 1 % de extracto de Ipecacuana

 

Extracto de ipecacuana

Extractum ipecacuanae

Raíz de ipecacuana en polvo semifino (tamiz nº 26):  1000 gramos

Alcohol de 70º: 6000 gramos

Extracto firme, color pardo oscuro

Dosis máxima:

De una vez: 0,30 gramos

En 24 horas: 0,30 gramos

 

Ipecacuana oficinal

Raíz

Principios activos: emetina, cefelina, psicotrina

Dosis máxima:

De una vez: 2 gramos

En 24 horas: 2 gramos

 

Jarabe de Ipecacuana

Syripus ipecacuanae gallicus

Extracto de ipecacuana: 10 gramos

Alcohol de 70º: 40 gramos

Jarabe simple: 950 gramos

 

Polvo de ipecacuana

Pulvis ipecacuanae

Debe contener un 2 % de alcaloides

Color: gris blanquecino